Después de haber estado tres días en Estonia, seguimos el recorrido rumbo a Finlandia. Son apenas 87 kilómetros los que separan a Tallin, la capital báltica, del país nórdico. Si bien se puede ir en avión, el transporte más elegido es el “ferry”, que es más bien un crucero.

Nosotros sacamos pasaje en la línea Star de Tallink Silja. La navegación es de 2 horas aproximadamente, que hay que saber aprovecharlas al máximo. Es que la oferta de actividades en el barco es muy amplia: pubs, shows en vivo, casino, shopping, deck, restaurantes y hasta un ¡Burger King!
Se trata del primer local flotante de esta cadena de fast food. Está ubicado en el piso 9 y, si bien tiene capacidad para 300 personas, la mayoría de los pasajeros elige la opción take away para disfrutar de una hamburguesa en cualquier otro espacio del crucero. En el deck, al aire libre, mirando el mar Báltico por ejemplo.
Los precios no varían mucho de los locales tradicionales. Un combo está entre 8 y 10 euros promedio (algo así como… 360 pesos argentinos 😳).
Este Burger King flotante, único en el mundo, fue inaugurado en 2016. Año que coincide con la apertura del sauna de esta misma cadena en Finlandia. Sí, en Helsinki podés comer hamburguesas dentro de un sauna. Aunque es una experiencia menos accesible: la reserva mínima es de 250 euros por 3 horas. 💸
¡Que genialidad! jajajajaja.
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Siiii, un Burger original 😂
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